Nuestro Rinconcito TID

Cuando el dolor viene en oleadas sabes lo que hay que hacer, ves la ola, respiras, coges aire y dejas que te azote y retumbe todo en tu cuerpo, sales y sueltas el aire. Así cuantas veces sea necesario...pero ¿Qué pasa cuando el mar está en calma? Ni los peces saben que significa eso, y son agua.  La sensación de estar como piedra en río me agarra y no me suelta... Yo no sé si quiero ser agua, pero sí quiero ser fluido, no sé si quiero verlo todo arder, pero sí quiero iluminar, no sé si quiero ser tornado, pero si volar...  ¿Qué pasa cuando repites los mismos patrones tóxicos de siempre?¿Podría envenenarme con mi propio veneno? De ser así...¿Lo haría?(Sí, así acabarías con todo) vuelvo a tener esa voz en mi cabeza que me dice que soy diferente, que no merezco amor, que no merezco lo que tengo. Que merezco lo que nunca tendré, porque por cómo soy, por ser yo, no podré alcanzarlo.  Vivo dentro de un caparazón que se me queda pequeño pero que no permite que salga a la luz la ...

 "Cuando estás en los márgenes equivocados pierdes la creencia de que la gente te ayudará, dejas de creer en El Sistema, en general, porque ese Sistema no está preparado para gente que tú consideras tu "igual", porque no está preparado para ti"  Nos hacen creer que el pobre es pobre porque quiere. Nos hacen creer que el Sueño Americano es lo normal y que si no lo consigues, es porque no lo has intentado lo suficiente. Pero no, éste no es un problema individual, es un problema estructural que no cambiará porque yo escriba estas líneas, porque los privilegios están muy bien montados, uno sobre otro, para que no puedas cambiar nada, aunque creas que sí. ¿Por qué? Porque rara vez los marginados tenemos el poder adquisitivo como para originar un nuevo movimiento, uno que haga girar diferente el eje de la rueda, ni podemos luchar muchas veces porque el eje que gira no nos aplaste hacia "abajo", hacia las periferias, hacia barrios marginales, conflictivos donde l...

 ¿Qué harías si tuvieras una segunda oportunidad de reescribir tu presente? ¿Y tu pasado? Yo creí que tenía el poder de elegir. Creí que todas las malas decisiones me habían llevado al lugar en el que estaba, mentalmente seguía buscando un campo, el campo al que siempre recurría, y allí, era feliz. Estaba cerca de morir, había oído el silenciador, notaba cada hueso roto y algo liquido fluyendo. Siempre creí que la muerte sería rápida, pero hay cosas peores que un disparo entre ceja y ceja. Lo estaba viviendo. No tenía forma de acortar esta agonía así que volví a soñar con el campo de Galicia que tanto extrañaba, me permití sentir el dolor emocional de saber que nunca volvería a ver a mi padre, que nunca sabrían que no me fui a estudiar a Estrasburgo, si no que me sedujo la idea del poder y terminé aquí... Lo último que me quise pensar antes de morir era en la cara de mis padres sonriendo. Y ahí, abracé la suave inconsciencia, por fin.  Alguien me levantaba del suelo, pero a mí...